Edu/Alex 8
Marc/Berni 7
Cuando un jugador que ha ganado dos partidos en todo el campeonato llega a los vestuarios anunciando que está tan convencido de la victoria que ni ha cogido la cartera, uno podría desternillarse de la risa. Más cuando el mismo jugador, al segundo juego del partido, empieza a jurar en arameo y a darlo ya todo por perdido. Pero MacSainz, de la mano de Eduardberg, río el último y río mejor. Porque el pádel, como la vida misma, da muchas vueltas y depara sorpresas, y si no que se lo pregunten a Marc Chang y Berni Robredo. Tras un inicio ajustado, tenían el partido encarrilado con un 7-4 en el luminoso, e incluso el Tigre de l’Hospi tuvo el detalle de acercarse a MacSainz para animarle. Pero el largo respondió al toque de corneta de su compañero Eduardberg, siempre excelso, que acudió al rescate del equipo y se lo echó a cuestas. Al juego ofensivo de ambos respondieron Chang y Robredo empequeñeciéndose cada vez más, hasta dejarse empatar, faltos de ambición y acierto. Aunque el guión les reservaba todavía un episodio de una crueldad insospechada. Sus rivales se pusieron por delante 8-7 segundos antes que sonara la bocina final, para sorpresa de los mismos contendientes, quienes desconocían que el reloj se agotaba. Así que unos se tropezaron casi de casualidad con la victoria y otros se quedaron con una cara de tonto que les durará unos cuantos días, como aquel al que lo adelantan por la derecha a pocos metros de la meta. Si van a un concurso de tontos quedan segundos, por tontos.
Bernat Segurola
Bernat Segurola
Com sempre, gran article del Segurola. Potser es podria haver recreat més amb el joc super-ofensiu i arriscat de la parella guanyadora en contraposició al joc mourinhà i amarrategui dels justament perdedors, però això podria encendre massa els ànims de Marc Chang i su brunete...
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