Muy mal sabor de boca

Dani & Uri 11
Marc & Àlex 9

Es lo que le quedó a McSainz y Marc Chang al término del encuentro. Nunca antes el infortunio y la mala suerte se cebaron tanto con una pareja de pádel.
Empezó el partido y sus inicios fueron de máxima igualdad hasta llegar al empate a 4 juegos. A partir de ahí, McSainz y Marc Chang pusieron la 5ª marcha y se marcharon en el marcador hasta conseguir un nada despreciable 8 a 5 a su favor. De modo que quedando ya sólo un suspiro para que se consumiera el tiempo reglamentario y los jugadores de las nueve calentaban ya en la zona colindante a la pista central, McSainz y Marc Chang tenían en su bolsillo su merecido punto, esa media victoria del nuevo reglamento de competición. Pero no, ayer la suerte no iba a estar de su parte. Esta vez no había nadie esperando el relevo de pista, de modo que sin prisa pero sin pausa, el tiempo, ese dueño y señor que quita y da razones, sería quien dictaría sentencia.
En el peor momento, cuando al toro sólo bastaba con clavarle la puntilla y como no podía ser de otra manera, McSainz inició su ya clásico cuadro de mareo, náuseas, vómitos y diarrea. Y ahí se aferró el equipo rival, Danilovic y Uri Becker vieron el filón, su única oportunidad e iniciaron una tímida remontada. Aún con esas, Mc Sainx y Marc Chang consiguieron situarse a tan sólo dos puntos de la gloria con un 9-7 y 30-0 a su favor. Pero de todos es conocido que de la gloria al fracaso hay un paso, y ese paso duele, y mucho. De modo que sin saber ni cómo ni cuando ni por qué, Danilovic y Uri Becker se llevaron el pato al agua y con un 11-9 poner punto final a un partido que si injusto sería decir que no merecieron ganar, más justo es afirmar que en ningún caso merecieron perder McSainz y Marc Chang.
Uno x Uno:
- Danilovic: inestable, desfondado. Como le ocurre a algún otro jugador del torneo, los destellos de talento lo mantienen vivo en los partidos. Si por su físico fuera, no pasaría ni el corte de clasificación. Tuvo paciencia y la suerte que se necesita para ganar un partido como el de ayer.

- Uri Becker: irregular. Hizo gala de su ofensivo juego en la red, alternando smashes definitivos con errores de parvulario. Al final del partido se quedó en el fondo de la pista y no arriesgó ni una bola. Eso y su dosis de suerte particular, le ayudó en la victoria final.
- McSainz: el resurgir de un mito. Realizó el mejor partido que se le ha visto en mucho tiempo. Jugó sólido, concentrado y con mucha confianza en su juego y sus posibilidades. Sólo le falló el físico. Él mismo reconoció en la zona mixta que tomará cartas en el asunto y sacará a pasear sus Nike Air Max para empezar a coger el tono muscular y el nivel cardiovascular óptimos para la competición.
- Marc Chang: físico. Llegó a las instalaciones en su flamante Specialized Rochhopper y consiguió subir la rampa sin levantar el culo del asiento. Esto es una muestra más del nivel al que están sus piernas (las tres). Pero si algo tiene el bueno de Marc Chang es que consigue convertir a jugadores desahuciados en auténticos competidores. Si Berni Robredo se había convertido en un jugador habituado a luchar por la permanencia, al lado de Marc Chang ha conseguido llegar a su máximo nivel con la consecución del liderato provisional. Con McSainz tres cuartos de lo mismo. Este jugador llevaba semanas rozando la descalificación, porque tu tono gruñón había superado los límites y ello no hacía más que repercutir en su juego. Si ya la semana pasada, McSainz y Marc Chang dieron muestras de ser candidatos a lidiar con cualquier toro ayer se licenciaron. La mala suerte hizo el resto.
Butanito García.

No hay comentarios:

Publicar un comentario