Pelotita caprichosa

Empezó la jornada igual que acabó la anterior, con Berni besando la lona, esta vez con la inestimable colaboración de Dani Hippy, que firmó un partido calamitoso, según admitió él mismo ante los micrófonos de la zona mixta.

Esperaba expectante la Pista Central el debut de la pareja más excéntrica del campeonato, integrada por Álex y Carpi, pero la enésima desventura del segundo obligó al primero a cambiar de pareja antes de empezar el baile, formando así con Alfred. Las exigencias del guión, pues, obligaban a descorchar una nueva liguilla cuando todavía está por dirimir el resultado de la primera. Y en estas empezó la contienda, con un inicio arrollador de Berni y Hippy, prometiéndoselas muy felices y encantados de haberse conocido. Sucedió que a Alfred y Alex les dio por subir a la red, plantar allí el autobús y empezar a ganar puntos, que fueron cayendo uno tras otro, para desesperación de sus rivales, incapaces de leer el partido.

Y así acabaron Dani y Berni, desahuciados y desquiciados, abandonados a su suerte, víctimas de su inoperancia táctica. El martirio del tercer set les reservó incluso una última crueldad. Cual película de Woody Allen, la caprichosa pelotita del último punto se paseó por la red pensándose de que lado tenía que caer, y pueden adivinar de que lado cayó.

Bernat Segurola
25.09.2008