6 6 Edu/Berni
2 2 David/Uri
Podría explicarles que las croquetas fueron lo mejor de la noche, pero no solo sería un titular reiterativo y poco original sino que faltaría a la verdad. Porque, para ser exactos, croquetas hubo, sí, aunque a precio de caviar. Vencedores en la pista, Berni Robredo y Eduardberg fueron derrotados vilmente en la barra, atracados por un camarero implacable, que les dejó literalmente helados, colándoles un pushing shot en forma de factura: la friolera de 9 euros y pico por dos claras y cuatro croquetas. Así que se tuvieron que rascar el bolsillo, porque la fianza de sus rivales no alcanzaba para las dichosas croquetas, que se les acabaron atragantando. Díganles tontos a Marat Carpin y Uricevic, que tomaron las de Villadiego nada más acabar el partido, momento en el que ambos se acordaron que tenían una cena. Se fueron a la carrera, corriendo más que en todo el partido. Porque más allá de igualar los dos primeros juegos de cada set, no hubo noticias de ellos. Intentó Carpin una de sus ofensivas trileras, pero no había nada que hacer. Las estadísticas daban por descontada la victoria de unos y derrota de otros, y ayer no era el día para romperlas.
Bernat Segurola
Em sembla que comença a ser necessari publicar al blog el reglament. No pot ser que setmana rere setmana els jugadors es saltin a la torera els articles que fan referència a l'abonament de les cerveses i, en el seu cas, les olioses croquetes.
ResponderEliminarSabem que la Federació formada per "trasnochados chupópteros abrazafarolas" està en hores baixes, però és imprescindible un cop de puny sobre la taula.
Bona crònica.
Una humil admiradora de Marc Chang.
quan les croquetes tenen tant protagonisme, mala pinta pel partit.. està tot dit... però ningú com segurola per explicar-ho amb maestría
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